CELS - Centro de Estudios Legales y Sociales
Somos parte del movimiento de derechos humanos argentino, surgido a fines de la década de 1970 para luchar contra la última dictadura militar. Cuatro décadas y media después, hemos conseguido algunos de nuestros objetivos fundacionales, como el juzgamiento de los crímenes contra la humanidad. Hoy, proyectos políticos en todo el mundo buscan re instaurar la legitimidad del autoritarismo estatal para responder a la conflictividad social. Ese es el contexto en el que sostenemos la lucha por la memoria, la verdad y la justicia, por el presente y por el futuro. Nuestra agenda de temas es amplia, esa es una de nuestras principales características, porque buscamos intervenir allí donde están en juego definiciones determinantes para la dignidad de la vida. Igual de amplias son nuestras acciones: litigios, acciones jurídicas en urgencias, investigaciones de casos y fenómenos, comunicación, servicios jurídicos a la comunidad, atención integral a víctimas, formación de activistas, incidencia en políticas públicas y en los órganos multilaterales y de protección de derechos humanos. Construimos, junto con otras organizaciones y activistas, una mirada latinoamericana sobre los problemas globales para intervenir en la agenda de derechos humanos a nivel internacional.
La democracia en la Argentina trajo objetivos nuevos que también le dieron forma a lo que el CELS es hoy: una organización que pelea por los derechos y la igualdad. Para lograrlo desplegamos las estrategias del movimiento de derechos humanos. Ninguna de estas estrategias funciona en el vacío: siempre que hemos logrado nuestros objetivos ha sido por el tejido de alianza con activistas, colectivos políticos, organizaciones y movimientos en la Argentina y alrededor del mundo.
Objetivos estratégicos y líneas de acción
Nuestras prioridades incluyen estrategias a escala local, regional o internacional en áreas que son centrales a la hora de ampliar posibilidades para una vida digna y justa y para resistir recortes y limitaciones a derechos y libertades.
Con estas intervenciones buscamos:
-Caracterizar, visibilizar y denunciar formas de opresión y autoritarismo que son
consecuencia de los modos en que el sistema productivo y de acumulación, el
patriarcado y el racismo se articulan para afectar de manera negativa la vida de
millones de personas, sus territorios y el ambiente en América Latina. El horizonte es
promover la construcción de un sistema igualitario, con justicia social y ambiental, a
partir de acuerdos amplios y la reivindicación del valor de lo colectivo y comunitario
por sobre lo individual.
-Ser parte activa de los movimientos sociales que buscan sensibilizar, denunciar,
resistir y movilizarse en alianzas transnacionales y transgeneracionales.
-Incidir en las instituciones estatales y supranacionales, a las cuales entendemos
como plataformas de discusión y disputa y no como instancias con capacidad de
cambiar la realidad por sí mismas. El horizonte es orientar la actuación de estas
instituciones hacia la protección y ampliación de derechos y contribuir a desarrollar
sus capacidades políticas y técnicas para intervenir en las condiciones estructurales
que producen injusticias sociales y ambientales.
Nuestras áreas de intervención prioritarias para lograr estas metas son:
- Las consecuencias de la concentración de la riqueza en la calidad de vida de las mayorías y en la sostenibilidad ambiental del desarrollo.
- El acceso pleno a los derechos a la salud integral, a migrar, a la identidad de género, al
acceso a la justicia y a la vivienda digna.
- La expansión de los sistemas de seguridad, inteligencia, justicia penal y penitenciario y su
funcionamiento como espacios de autoritarismo estatal, selectividad y racismo
- Los fenómenos de violencia público privada -entre ellas, las violencias producidas por la
dinámica del narcotráfico
- Los procesos de memoria, verdad y justicia simultáneos o posteriores a las violaciones
masivas a los derechos humanos.
- Los fenómenos asociados al crecimiento de los grupos de la ultraderecha, su inserción
política e institucional y su capacidad para condicionar la vida política y permear
socialmente con discursos adversos a la democracia, la igualdad y los derechos humanos.
Nos preocupa el avance de tendencias autoritarias ancladas en estas ideas y que ponen en
riesgo la vida democrática.
- La construcción de organización social y política, que reivindique lo público, colectivo y
comunitario por sobre el individualismo, y la defensa del ejercicio pleno del derecho a manifestarse, expresarse y peticionar a las autoridades.